Más de 25.000 representantes de 200 países se reunieron en Madrid: jefes de estado y de gobierno, científicos, empresarios, representantes de multinacionales y todo un movimiento colectivo que lucha por marcar acciones definidas y concretas para frenar el cambio climático y conservar nuestro planeta para las generaciones futuras.
Nuestro Taller de YVC comenzó con una sesión práctica de yoga Antiestrés y acabó con una conferencia en la que relacionamos nuestra práctica de yoga con el bienestar y la armonía individual.
Cuando una persona encuentra su equilibrio interior es más capaz de buscar esa misma armonía con los otros y sobre todo con el mundo en el que vive de manera coherente y comprometida, creando una cultura de paz global. En estos momentos de urgencia planetaria es indispensable ese compromiso vital con el entorno.
El principio de Ahimsa, principio de la no violencia, nos empuja a conservar, mantener y proteger a todos los seres vivos y a nuestro planeta. Así hemos llevado a cabo acciones concretas de reforestación en Huesca y en Gran Canaria, y trabajamos por un entorno más sostenible, también desde la alimentación y el compromiso con el vegetarianismo.
El aire, el prana, es vital para nuestra vida y las técnicas de respiración son básicas para la salud de nuestro cuerpo y para nuestro equilibrio emocional. ¿Cómo vivir y sobrevivir en un entorno contaminado? ¿Cómo dejaremos esa herencia a las generaciones futuras? La respuesta está en nosotros. En todos nosotros y nuestras acciones individuales que se suman a las del resto del mundo, siendo una única fuerza de cambio. Juntos para mejorar.
